viernes, 10 de febrero de 2017

El cuento con el que a mis queridos amigos vinieron a engañar. E.P.D.

 El cuento de los políticos, que por los años 1.947, a los inocentes niños en Salar nos vinieron a contar. ¡Qué en la izquierda todos eran igual! Que no existía el capital. El  cuento con el que a mis queridos amigos vinieron a engañar.  E.P.D. 

 En la población de Salar, Granada, manda la izquierda desde el final de la dictadura franquista. La primera dictadura que se vivió por su época.  En el camino real o la colada en Salar, los pobres edificaron su hogar haya por  los año 1.953. Ya que en la calle sin  hogar podían  estar, apretados con familiares y demás. Por  las circunstancias de la época de lo que años atrás vino a pasar. 
Y construyeron en lo que no era de su propiedad y las casas en este lugar hechas están, hubo libertad.  

 Llegó la segunda dictadura; la de izquierdas que democracia suelen llamar. Al estar una propiedad cerca de un río, obra no puedes edificar y en madera una caseta  te  harás, así contigo no se meterán. Pero hay que ver la villa romana lo cerca del río que está. De obra de hierro y cristal hecha está. La propaganda que le suele dan, y quien una vez va a visitar dirá que: “¡Fue a visitar y jamas volverá!”

Con la dictadura Franquista desde la calle Río a los Molinos, existía libertad para toda la población de SALAR, y forasteros que pudieran pasar por los lados de la acequia conocida como el Kal. Estos terrenos en la época que los marqueses hicieron venta de sus propiedades tengo entendido  fueron regalados para los habitantes de Salar, ya que en el río la ropa se venia a lavar, extender y dejar secar.

 Hoy con la segunda dictadura que democracia suelen llamar y que en Salar, la izquierda suele mandar. Comunistas y Socialistas. Hoy de los Molinos a la calle Río no se puede pasar, por los obstáculos que el particular vino a colocar, con conocimiento de las autoridades locales, ya que tanto socialistas como comunistas son autoridad local y cobran su salario mensual, sin impórtarles el terreno que los marqueses dejaron por vida para disfrute de los habitantes de Salar, y demás. Y  se cumpla el refrán que dice: “La izquierda su propiedad jamás repartirá con los demás, y la tuya repartirá”.  Zapatero  te endeudó. De izquierdas se nombró. Tal sitio se dividió para el fumador. Despues a la calle al fumador tiró. 

  Doña  Ana Conde Trescactro que fue alcalde de Salar, por el partido socialista, no se le ocurrió otra cosa que donar a un particular, para que sólo él disfrutara un trozo de terreno que Marino Ramírez Trassierra dio para dominio publico al Ayuntamiento para disfrute de todo Salar, y demás. ¡Pero de su propiedad nada vino a dar!  ¡Qué causalidad!

 Este terreno anteriormente nombrado según costaba en el Registro de la propiedad de Loja, lindaba en aquella época con otros de Encarna Conde que fue desagregado de esta finca, y con Maria Corpas. Hoy ya difuntas, que E P D, que Marino compró y donó a SALAR.

  Suponemos que el Ayuntamiento de Salar, donde mandan los comunistas, hará todo lo posible para que el referido terreno regrese a ser de dominio público; de toda la población de Salar y de cuantos la vengan a visitar. O harán lo mismo que los demás; “dejárselo a cualquier  amigo particular”. Pero nunca darán nada de su propiedad.

Suponemos que lo expuesto en este escrito tramitado por Internet tome nota el Ayuntamiento de SALAR. Y en el registro de la propiedad de Loja verifiquen la propiedad de cada cual, para que prospere Salar.y se deje pasar por la acequia conocida por El kal a los molinos y demás.

 Ya veo prosperidad en Salar si se abre el paso desde la calle Rio por las acequias a los Molinos. Como en épocas pasadas, que la ropa se venía al río a lavar y dejar secar.

         Sin nada más que exponer.  Mis mejores saludos van para todos los habitantes de Salar
                 
                                   Marino Ramírez Trassierra a 15 de Febrero del 2.017